“Puedo ver los pensamientos llegando mientras corro -quiero parar ahora
mismo; me gustaría que esto acabase- y los veo como lo que son sólo
pensamientos, no tienen que ser mi realidad”.
Jesse Siryn Davis
Batida de pasos ligeros,
bandada de pensamientos oscuros y dañinos que se atrincheran como un muro de
hormigoón, me hacen preguntas, son dañinos, me atacan, yo sigo corriendo,
huyendo de ellos. Inspiro, cojo aire, zarandeo y golpeo mis ideas, apuesto por
mis repuestas, espiro tranquila, me hago fuerte.
Ahora en mis sienes se
agolpa la energía que brota de mis entrañas, que palpita velozmente. Adentro
mio tengo un motor que ruge, si no lo remuevo no lo siento, pero tengo que ser
consciente de este ser latente que llevamos todo dentro, donde guardamos esa
vitalidad desbordada, de energía devastadora para romper el muro de las dudas
que nos acechan, ese muro de hormigón que ahora solo es imaginario.
Un cuerpo que corre
expresando dolor, se ha convertido en un cuerpo que expresa energía, que con
cada zancada se ha ido reavivando y huyendo de la desmotivación y la angustia
que esclavizaba sus tobillos. Ahora a paso ligero corre libre, Superando el
reto de la adversidad cotidiana. Todo eran pensamientos. Ahora brota el
sentimiento de la calma, de la satisfacción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario