jueves, 14 de noviembre de 2013

Ir más allá

9:00 a.m. Time out for running… 8km, 43 min pensando filosofando, con la mente adormecida y fría, salgo a correr para llenar esos espacios en blanco, a calentar mi cuerpo con emociones que estaban escondidas bajo la piel en los huesos, tan adentro que ya ni la sentía. Pero corriendo uno se queda en carne viva y todo fluye y sale a la luz de este sol de noviembre que aún aprovechamos!

“Hasta el mas valiente de nosotros pocas veces tiene el valor de enfrentarse  con lo que  realmente sabe… “
F. Nietzsche
“La vida deviene resistencia al poder cuando el poder toma por objeto la vida” 
Deleuze

Desde la nada y contra el dominio se escriben estas líneas. Ir más allá, lanzarnos a la nada y hacernos cenizas , abiertos a todo, rompiendo con lo existente y jugando estrategicamente. Nos lanzamos  al conocimiento y nos liberamos con él. Tenemos la necesidad de encontrar u mundo cueste lo que nos cueste.
Toda persona a veces siente una fugaz sensibilidad absurda  del vacío tanto exterior como interior. Este vacío lo guardamos en las entrañas. Es el sin sentido de la vida, la angustia existencial, la carga más pesada. Sentarse cerca de la duda aunque sea por unos instantes, llorar, reflexionar juzgarse, juzgar a la humanidad. Culparse, exigirse. Hacer campaña contra uno mismo. Asumiendo la muerte, su propia muerte, muriendo continuamente hasta reducirse a cenizas,  sin necesidad de reducirla al fallecimiento, y después negarla en cada pensamiento.
Por que nada se quiere dominar, y el lenguaje , la escritura no es lo realmente importante  ya que esta sometido a la lógica del sistema que todo lo domina, ya sea porque lo relevante es ir un poco más allá de todo esto… solo lo dejamos como un instrumento de comunicación del lenguaje para transmitir mi idea sobre el mundo y nuestra, mi experiencia en él, mi lanzamiento a la nada superando el yo que me domina y nos hace caer y nos arrastra hacia ella convirtiéndonos en un error.
Sin estar obligados a vivir a tener un din u objetivos, nos encontramos ante una existencia frágil que carece de sentido. Así nos encontramos frente  a una acumulación de fuerzas de fuerzas que se acumulan compitiendo entre sí , primero para buscar unas señas de la identidad perdida y aniquilada por la nada y encontrar el verdadero sentido existencial por medio de la razón  u otros caminos.


A partir de un nacimiento involuntario ponemos en tela de juicio la obligación de reconocernos y continuar con  nuestras vidas, con la obligación de perpetuarnos como especie. Con el paso de los años elaboramos una identidad basada en los valores inculcados desde el nacimientos por la cultura familiar y social, estereotipos y bagajes que vamos asumiendo a lo largo de los años . Nos vamos quedando supeditados a la destino y a la muerte, a las enfermedades y nos esclavizamos al miedo, al fracaso, a la frustración y a la soledad.
Pero da igual que fuera un nacimiento voluntario o involuntario, ya estamos aquí, y nos toca decidir, vivir y cómo hacerlo.El capitalismo y el Estado necesitan  personas estandarizadas para el funcionamiento social, el hombre moderno necesita sentirse cerca de los demás , sentir que encaja en este mundo, que es uno más. Pero se siente solo cuando reflexiona sobre su vida en soledad y encuentra un rato de tranquilidad después del trabajo.De ahí el miedo a la caída, a la ansiedad, problemas de nervios, depresiones, suicidios, y demás problemas psicológicos que afectan cada vez más a las personas que nos rodean.
Quizá nos creamos que todo está perdido hasta nosotros mismos y nos encontremos en una delgada línea vacía línea fina hacia el abismo pero en ese punto quizá podamos resurgir cual Ave Fenix.  Por que quizá para nacer de nuevo haya que destruir, haya que lanzarse más allá de esa nada para superar todo ese dominio y adelantarnos al enemigo.
            

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